Editorial:
La República Dominicana atraviesa un momento crucial. A nuestro presidente, Lic. Luis Rodolfo Abinader Corona, le restan tres años de gobierno que no deben malgastarse en simples traslados administrativos ni en remiendos superficiales. El país exige cambios reales, transformaciones de fondo y un equipo de gobierno con sangre nueva, compuesto por técnicos, profesionales probos y ciudadanos íntegros.
Desde la altura de la estratósfera —como metáfora necesaria— se distinguen claramente los errores, los aciertos, las frustraciones y las esperanzas de un pueblo que no puede esperar más. Gobernar no es improvisar; gobernar es servir con dignidad, decencia y transparencia.
Hoy la historia ofrece al presidente la oportunidad de rectificar, de limpiar las manchas recientes y de culminar su gestión con honor. Para lograrlo, debe despojarse de quienes empañan su administración y conformar, de una vez por todas, su verdadero Dream Team gubernamental.
En palabras de la sabiduría popular de Vallejuelo: “El pamo con tiempo tiene cura.” Todavía hay espacio para corregir el rumbo y recuperar la confianza ciudadana.
La República Dominicana se lo agradecerá.
