En este momento, la voz de la República Dominicana se alzó con fuerza en la ONU
El presidente Luis Rodolfo Abinader Corona habló con temple y claridad: la soberanía no se negocia, se defiende. Frente a la crisis haitiana y los desafíos internacionales, nuestro país dejó claro que tiene dignidad, memoria y futuro.
El mandatario presentó datos, cifras y hechos concretos que reflejan la urgencia de proteger nuestras fronteras, garantizar seguridad y promover la cooperación regional.
No fue un discurso populista. Fue un mensaje firme, sereno y necesario, que coloca a la República Dominicana en el plano internacional con respeto y autoridad.
Recordemos a Juan Pablo Duarte: “Vivir sin Patria es lo mismo que vivir sin honor.” Y a Francisco del Rosario Sánchez: “El que se sacrifica por su Patria no muere.”
En este instante, más que nunca, esas palabras nos convocan a la unidad, al compromiso y a la acción. Porque la historia recoge discursos…
pero solo las acciones dignifican a los pueblos.
Que este mensaje nos inspire a todos los dominicanos a mantenernos firmes, vigilantes y orgullosos de nuestra tierra, nuestra gente y nuestra historia.
